lunes, 11 de julio de 2022

NUEVE PAUTAS PARA MEJORAR LA GESTION DE LA DIVERSIDAD EN LAS ORGANIZACIONES

Hace unos meses, en este mismo blog, anticipábamos que dos estudiantes del Máster en Gestión de los Recursos Humanos en las Organizaciones de la Universitat Autònoma de Barcelona estaban elaborando un estudio sobre la Gestión de la Diversidad en los Procesos de Selección, del que se esperaba obtener una aproximación lo más realista posible e identificar buenas y malas prácticas al respecto que puedan servir de referencia a los profesionales de RRHH. 

Pues bien, ya podemos anunciar con satisfacción que el citado estudio ha sido presentado recientemente con una favorable acogida. De su contenido, además de los conceptos académicos, destaca la información obtenida en el trabajo de campo realizado a través de sendas entrevistas a cuatro expertos en discriminación en el acceso al empleo y, principalmente, la aportación que supone para los profesionales de RRHH la Guía de Pautas para la mejora de la gestión de todos los procesos implicados.

Con esta guía, las autoras sintetizan los hallazgos de su trabajo, los convierten en recomendaciones prácticas y los ponen a disposición de cualquier profesional que quiera optimizar la gestión de RRHH de su empresa desde una perspectiva inclusiva.

Estas buenas prácticas tienen un impacto tanto en la rentabilidad de la organización al aprovechar el mejor talento disponible y mejorar el clima laboral, como finalmente en toda la sociedad al aumentar la igualdad de oportunidades y la satisfacción laboral entre una mayor parte de la población.

Aunque en el trabajo se hace referencia a tres tipos de discriminación (de género, discapacidad y orientación sexual), estas pautas son generalizables a un amplio espectro social, por lo que pueden contribuir a minimizar otros tipos de discriminación (edad, etnia, etc.)

Por su indiscutible valor y con permiso de las autoras, a continuación, se detalla un breve resumen de cada una de las pautas propuestas, desde las más genéricas a las más operativas, teniendo en cuenta que se trata de una propuesta de intervención integral, destacando la necesidad de coherencia entre todas ellas:


-          Cultura corporativa. Tener claro y definido el grado de compromiso y voluntad de la empresa. Puesta en valor de la igualdad de oportunidades, el respeto a la diferencia y el rechazo de cualquier forma de discriminación, todo ello impulsado y respaldado desde la Mesa de Dirección.

 

-          Normativa interna. Mejorar el marco normativo interno de tal modo que garantice la inclusión y proteja en todo momento la diversidad de manera clara y explícita, revisando y adaptando las políticas de la empresa recogidas en planes, formularios, reglamentos, protocolos, etc.

 

-          Clima laboral. Estudiar la percepción interna actual en relación con fenómenos discriminatorios. Por ejemplo, generando encuestas anónimas que permitan identificarlos y, a partir de ahí, desarrollar otro tipo de acciones.


-          Formación y Desarrollo. Hacer conscientes a los miembros de la organización y en especial a los técnicos de RRHH de cómo funcionamos en términos de sesgos inconscientes, prejuicios y estereotipos, con materiales concretos sobre diversidad, abordando cuestiones como terminología y su significado y ofreciendo esta formación como un recurso opcional y no como tarea obligatoria para toda la plantilla, ya que esto podría generar el efecto contrario si se percibe como una imposición.

 

-          Comunicación interna. Difundiendo contenidos (foros, charlas, ponencias, testimonios, etc.) que promuevan la sensibilización y toma de conciencia mediante la reducción del miedo a tratar acerca de estos temas y contribuyendo a su normalización.

 

-          Análisis y descripción de puestos de trabajo. Descripción técnica y clara de cada puesto de trabajo, sus funciones y tareas, la organización del tiempo de trabajo y las preguntas sugeridas a los candidatos de acuerdo con las aptitudes y formación necesarias para el puesto, describiendo de manera objetiva los requisitos del puesto.

 

-          Difusión de ofertas de empleo. Revisar los canales y el contenido de los mensajes que se difunden, utilizando siempre un lenguaje inclusivo y no discriminativo.

 

-          Reclutamiento y criba curricular. Utilizar formatos de CV donde no se tenga en cuenta la información personal sino solamente la profesional y la relacionada con lo que puede hacer el candidato (CV ciego).

 

-          Proceso de Selección. En la comunicación con el candidato y especialmente en las entrevistas de trabajo utilizar preguntas predefinidas que excluyan todo aquello que pueda comportar un sesgo. Omitir preguntas directas sobre la vida personal y las intenciones futuras y utilizar preguntas centradas en el desempeño del puesto de trabajo. El técnico de selección ha de recibir formación también para evitar en la medida de lo posible prejuicios y estereotipos en la interpretación de las respuestas y la valoración de los candidatos.

 

Una última consideración sobre el proceso de selección, que debería ser una obviedad para cualquier profesional de RRHH pero que, a la vista de los datos de esta investigación, merece ser recordada: los procesos de selección deben basarse únicamente en los principios de capacidad personal, eficacia y mérito.